Por J. Humberto Cossío R.
Si las cosas no se arreglan ente Irán y Estados Unidos será muy riesgoso visitar los lugares que nos atraen a los mexicanos.
Bin Laden se atribuyó el derrumbe de las torres gemelas de New York y con su vida pagó el pronunciamiento.
Donald Trump festinó el asesinato del General Qusem Soleimani por medio de misiles instalados en drones, y que impactaron el lugar donde se encontraba el segundo en importancia en Irán y eso tendrá un costo si no hay arreglo.
El edificio más emblemático en Estados Unidos es el Empire state y es muy visitado por el turismo internacional.
El puente Golden Gate de San Francisco es otro lugar de gran afluencia los 365 días del año.
Disneland bate todos los record en visitantes año con año.
La Florida es el gran lugar costero donde las celebridades tienen sus casas y Donald Trump es dueño de varios edificios de alto costo.
El Yankee Stadium luce repleto de aficionados durante la temporada del beisbol.
Lo mismo sucede con el Dodger Stadium que mantiene una altísima afluencia por temporada.
La Casa Blanca es un lugar que los terroristas quisieran acabar.
Lo mismo el Capitolio que se les escapó por poco a los terroristas comandados por Bin Laden.
El Pentágono sufrió daños severos pero no fue destruido.
Un terrible suceso sería si atacaran a Las Vegas en Nevada.
Es el centro del juego en el mundo y jamás deja de haber bastantes miles de hospedados en sus hoteles cada día del año.
Cualquiera de estos lugares que fuera atacado por los seguidores del terrorismo iraní, causaría un daño de horrorizantes dimensiones a nuestra vecina nación.
Los mexicanos somos muy dado a irnos de shopping a las tiendas gringas y con mucha frecuencia visitamos San Francisco, Las Vegas, Disneland y New York.
Dios nos agarre confesados que suceda un ataque cuando nos encontremos de visita por la tierra de Trump.
Hay que tener mucho cuidado con lo que aparezca en los próximos meses.
Donald tiene zafados varios tornillo y para los terroristas morir en nombre de Alá es una bendición.
Trump ya tiene precio por su muerte.
A los terroristas iraníes lo que les sobra es dinero.
Hay que estudiar con los ojos muy abiertos la política internacional y el calentamiento o enfriamiento entre Estados Unidos e Irán.
En estos momentos hay mucho riesgo.
Pero pueden aumentar las posibilidades de atentados contra las ciudades que hemos mencionado.
A nadie le gustaría ser atrapado por bombazos.
Nuestro cuero no es de la realeza británica, pero para mi interés personal es muy valioso y lo quiero conservar lejos de conflictos ajenos.
Aguas con el hijo de Qusem Soleimani.
Sentenció a Donald Trump y yo le creo.
Hasta mañana.