Punto y Coma Noticias

FAX DEL FAX

Por J. Humberto Cossío R.

Otra promesa que jamás cumplirá Andrés Manuel López Obrador a los estudiantes de México.

El presidente, solemnemente en su mañanera, se comprometió a donar el premio de la rifa del avión si resulta afortunado con los veinte millones.
Delante de los reporteros en su mañanera compró su cachito de participación y pagó con un billete de quinientos pesos.

El vendedor se los embolsó y hasta ahí todo parecía ser un acontecimiento normal, pero de muy alto rango.

López Obrador tomó su cacho de la lotería y lo exhibió con orgullo a los ojos de los testigos presentes y ante las cámaras de televisión de cobertura nacional. Ahí fue donde salió su compromiso en caso de ser afortunado.

¡Oh decepción!

Resulta que el billete de lotería nunca jugará en las tómbolas.

No existe un billete que solo contenga ceros y ese fue el cacho que se embolsó el presidente de México.

Lo chingaron los responsables del sorteo y jodieron de paso las posibilidades de los estudiantes.

Andrés Manuel debe meter a la cárcel al responsable de la estafa.

Es un delito federal y cometido por un alto funcionario de su gobierno.

El Fiscal General de la nación debe tomar cartas en el asunto, y consignar ante un Juez al autor del atraco al presidente de la República que frustró el compromiso de Andrés Manuel López Obrador.

Claro que puede comprar los que le de la gana al presidente.
La tesorería de la nación está abierta las 24 horas del día para sus caprichos públicos y personales.

Son quinientos pesos que cuesta un cachito.
Pero el fraude se magnifica cuando se jode a una autoridad con el rango supremos de autoridad y Comandante en jefe de las fuerzas armadas.

Aparte de todo lo que se desprende de ese estafa, ponen de relieve que nuestro primer mandatario es un ingenuos en el mejor de los casos, o un pendejo, si llevamos las cosas al extremo de la inteligencia.

El cese inmediato solicitamos para el desgraciado que timó a un tabasqueño mañanero.

Si no lo cesan, es que hay una complicidad o colusión de alto nivel.

Andrés Manuel torció a los empresarios con una cena en Palacio Nacional y los extorsionó con veinte millones a cada asistente.

Eso es un atraco de gran categoría.
Pero joder al presidente de México y ponerlo en evidencia ante los ojos de los mexicanos, son más que chingaderas.

Eso hicieron con el billete que le vendieron para el sorteo del avión.

Intolerable que a un ciudadano común lo hagan pendejo, pero que al presidente de México lo estafen públicamente no puede haber perdón de Dios y de las autoridades terrenales tampoco.