Por J. Humberto Cossío R.
Dos puntualizaciones a los que llegan con el mitote caliente hasta los lugares que hemos escogido como mentideros políticos.
Primero tocaré el tema del error en que uno de mis amigos se encuentra, sobre si el nuevo partido de la maestra Elba Esther Gordillo puede ungir candidato a Gobernador en Sinaloa.
Digo en Sinaloa, por ser el Estado que me interesa. Sacándolo del error entenderá que en todo México Las Redes Sociales progresistas pueden tener candidatos a las gubernaturas que estarán en juego.
Obteniendo el registro como partido, en automático tiene derecho a todo, salvo a establecer alianzas o coaliciones, a menos que sean de facto y que no son reguladas por el INE o los Consejos estatales electorales.
Aclarado el punto, ya puedo decir que Gerardo Vargas Landeros será candidato al gobierno de Sinaloa en el 2021.
Otro tema que fue planteado recientemente, que el PRI nacional le pedirá a los que quieran ser candidatos a una gubernatura, soliciten licencia de sus cargos si son funcionarios estatales o federales.
Les solicitarán, según el mismo rumor, a los Senadores de la República, que obtengan licencia y no estar en ventaja sobre los funcionarios públicos.
El PRI pedirá equidad a todos los aspirantes.
Recordamos el caso de MALOVA. Se despachó con la cuchara grande recorriendo Sinaloa con la estafeta de Senador.
Si es verdad lo que se corre, nuestro Senador Mario Zamora Gastelum tendrá que solicitar licencia como si fuera un funcionario más en la jugada.
Estoy hablando únicamente del PRI y claro está que Rocha Moya o Himelda Castro para nada querrán tener ese tipo de limitaciones.
Ellos recorren el territorio y Rubén Rocha Moya se pinta como el vaquero Marlboro y la chapita Himelda guarda un perfil más bajo, pero de ninguna manera es menos efectivo.
Hay quién opina, que Rocha Moya es la res que los ganaderos de los ríos infestados de pirañas arrojan para que se la coman y mientras destrozan a unas reses enfermas los vaqueros cruzan al ganado sano que les interesa.
Volvamos con la supuesta determinación que se cocina en el PRI de poner en el taste con las mismas armas a todos los aspirantes y sin fueros o ventajas de escritorio.
De ser así, Mario Zamora estaría pidiendo licencia desde finales del 2020 y dejaría su Senaduría en manos del suplente.
Puntualizo que Gerardo Vargas Landeros será candidato en Sinaloa al gobierno del Estado y con miras de sustituir a Quirino Ordaz Coppel.
Puntualizo también, que el PRI no tiene la mínima oportunidad de ganar la gubernatura y serán otros los que se coman el pastel.
Lo que no puedo dar por hecho, es que Rubén Rocha Moya sea el candidato que escoja el presidente Andrés Manuel.
La lucha en Sinaloa será para recuperar el Congreso y una que otra diputación federal.
Apoderarse de nuevo de las principales presidencias municipales en manos de Morena es otro de los objetivos.
Pero olvídense que el PRI sostenga la gubernatura de Sinaloa.
No habrá nadie que los apoye y tampoco nadie que los financie.
Rocha Moya, Himelda Castro, Gerardo Vargas Landeros o Melesio Cuén pueden llegar al relevo de Quirino.
No descarto a nadie de los que pintan en el panorama político.
Pero el tricolor es un cadáver insepulto y hediondo.
Hasta mañana.
