Por J. Humberto Cossío R.
La Niña, la Pinta y la santa María.
Tres cascaritas navegando al mando de un soñador que convenció a los reyes de España para que financiaran su viaje.
Por causa de Cristóbal Colón somos descendientes de españoles.
Este hombre es el responsable, de que después llegara Hernán Cortez y en nombre de la madre patria nos bautizaran como la Nueva España.
Entre Cristóbal y Hernán se tienen que repartir parte de mi coraje.
El jirón del mundo al que conocemos como México dio lugar a que se fundara el Estado de Tabasco.
Y adivinen:
Ahí nació Andrés Manuel López Obrador un 13 de noviembre de 1953 en Tepetitán, Macuspana, Tabasco, para desgracia de muchos millones de mexicanos que tenemos que soportarle sus tarugadas por las mañanas.
Un presidente que tiró por la borda un año del mandato presidencial, más los meses de agosto a diciembre del 2018 que le quitó el poder a Peña Nieto.
Sus frases favoritas.
“Abrazos en lugar de balazos”.
“Yo tengo otros datos”.
“Son ataques de los conservadores”.
“No creció la economía, pero estamos mejor que antes”.
“Amor y paz”.
Lo que diga mi dedito.
No subirán las gasolinas.
Tampoco la energía eléctrica.
Ni el gas doméstico.
Esa es la inteligencia que tenemos en Palacio Nacional.
Creo que hay alguna razón para que España se disculpe con México.
Acaso no es suficiente motivo que hayan llegado los españoles a lo que hoy es Tabasco, y ahí echaran raíces los venidos de la madre España y se fundara la dinastía de donde viene el presidente Andrés Manuel.
Eso calienta y enerva.
Si hubieran dejado sin conquistar esa parte de lo que hoy es Tabasco, no existiera Andrés Manuel y estaríamos respirando un ambiente sano y sin tener que escuchar las pendejadas del que ocupa la presidencia.
Así que, majestades de España, nos deben una sentida disculpa por ese agravio de lesa humanidad que se tradujo en el nacimiento del peje lagarto.
Tabscoob era el cacique indígena en 1518 y combatió a las huestes de Hernán Cortez en esos años.
Parece que de ahí viene el nombre de la tierra de Andrés Manuel.
Tabasco se declaró independiente de México en 1841.
Fue la última oportunidad que tuvimos, para que en nuestros tiempos, no conociéramos a Andrés Manuel los mexicanos.
Pero se cebó el cuete y es nuestro presidente.
Hasta mañana.