Punto y Coma Noticias

FAX DEL FAX

Por J. Humberto Cossío R.

Tres enfermedades trataré en este comentario.

El caso de los “guevos naranja”

Los fallecimientos por inmoralidad y deshonestidad aguda.

Y el padecimiento de Pinocho.

En tres sesiones con el brujo de su pueblo le quitaron la coloración naranja en toda el área que ocultan los calzones.

Lo pasaron por sesiones de humo a que llamamos limpias y que sirven para quitar los malos conjuros que se hacen en nuestra contra.
Lavado de las partes nobles con solución preparada especialmente para el hombre de los “guevos naranja”.

El final de la enfermedad llegó, cuando le prohibieron al enfermo comer “chetos” viendo la televisión y rascarse las bolas con la misma mano usada para sacar las golosinas de la bolsa.

Se curaron los guevos naranja.

Llevamos más de 28 mil fallecimientos por el COVID 19 y la razón nos la puso a la vista el Dr. Hugo López Gatell, al informarnos que el presidente de México es inmune al contagio por ser hombre moral y honesto.

Siguiendo al vocero nacional de la pandemia, tenemos que concluir que los muertos que llevamos y los que sigan cayendo, son obra exclusiva de su inmoralidad y deshonestidad a contrario sensu de la inmunidad de Andrés Manuel.

No tenemos idea si en las farmacias venden medicamentos contra la inmoralidad o deshonestidad, pero ya sabemos que es el remedio que prescribe el gobierno federal por conducto de Gatell.

El gobierno de México, a diferencia de otros países y gobernantes, busca elaborar vacunas contra la inmoralidad y deshonestidad y con eso acabarán con la pandemia del Coronavirus 19 y a bajo costo.

Que chingón resultó ser Hugo López Gatell.
La enfermedad de Pinocho es muy visible en el gobierno que padecemos de la cuarta transformación.

Lo acabo de escuchar al presidente.

Habló de un país que no sabemos en que planeta se encuentra ubicado.

“Dijo que los homicidios dolosos han caído de manera constante con su administración y que la violencia de la delincuencia organizada disminuye de manera acelerada.

“Que gracias a los ahorros de sueldos de los altos funcionarios y a la recaudación tributaria eficiente, tenemos un México boyante y sin endeudarnos.

“Que el 70% de la población más pobre ahora goza de los beneficios de su gobierno y que en poco tiempo lo gozaremos el 100%”.

México libre de corrupción (no hay Bartletts y tampoco Yeickols).

Escuché de una economía que es ejemplo de otras naciones y que hará que seamos del primer mundo y libres de neoliberalismo y saqueos.

Escuché que en menos de dos años las cosas han cambiado en su totalidad en todo el territorio mexicano.

Los padres de niños con cáncer le pidieron a la primera Dama de México su atención personal y les contestó que no es médico y que se rascaran con sus propias uñas si son doctores.

Dejó sin apoyo a las madres y padres que trabajan y cuidan de sus hijos, al suspender las guarderías y dejó en el aire la educación temprana de la niñez.

Les pido perdón a los que han muerto por la ineficiente atención de las autoridades federales, encabezadas por el cínico PINOCHO que padecemos y que nos tiene ahogados con sus mentiras del combate al COVID 19.

Gatell los calificó como deshonestos e inmorales, y yo los llamo víctimas de la ineficiencia de un sistema de salud colapsado, por un presidente que presume de Juárez y Lázaro Cárdenas que no pueden salir de sus tumbas y pegarle una madriza.

El mal de Pinocho será la pandemia del sexenio.
Que desvergonzado Andrés Manuel.

Hasta mañana.