Por J. Humberto Cossío R.
“Porfirio Alejandro Muñoz Ledo y Lazo, grande entre los grandes”
“Con el chisguete de voz que le queda, obliga a guardar silencio a la cuarta transformación del iluminado Andrés Manuel.
“La conciencia de la izquierda mexicana”
Nacido en la ciudad de México un 23 de julio de 1933.
Considerado como uno de los genios de México.
Abogado egresado de la UNAM y con Doctorado en Derecho Constitucional de la Universidad de París.
Doctorado en Derecho Comparado en Cuba.
Maestro de la UNAM y de la Universidad de París y en Oxford.
Secretario del Trabajo y Previsión Social con Luis Echeverria y Secretario de Educación Pública.
Senador de la Republica y candidato a la presidencia por el PARM.
Fundador y presidente del PRD.
Asesor de la campaña de Vicente Fox Quesada.
Diputado federal en esta legislatura.
Representante permanente de México ante la ONU.
Y un chingo de blasones que llenarían mi espacio sin hacer comentarios diferentes.
Es un toro miura y con un agudo sentido del humor y de la sátira política.
Andrés Manuel y su gabinete completo se aprecian como enanos ante la figura de Porfirio Muñoz Ledo.
Lo recuerdo en tiempos de Cuauhtémoc Cárdenas Solorzano en el desayunador del entonces Hotel Ejecutivo en Culiacán.
Se paró entre las mesas de los ahí presentes y con una gran sonrisa nos pidió votar en favor del que Manuel Bartlett le robó el triunfo.
“Voten por Cuauhtémoc, nadie sabrá que lo hicieron, soltó la carcajada y estrechó la mano de todos nosotros”.
Muy empático y en eso coincidimos todos.
Daban ganas de hacerle caso.
Jamás pasa desapercibido y su trascendencia ha sido internacional.
No pudo ser presidente de México y creo que los mexicanos salimos perdiendo.
Se ha convertido en el cuchillo de palo entre las costillas del presidente Andrés Manuel y con su voz pone a temblar a todos los de la presunta izquierda transformadora.
Ninguno como Porfirio y eso lo saben sus compañeros legisladores, el presidente de México y los miembros del gabinete.
Sus palabras abren surcos en la carne de la supuesta cuarta transformación y las llagas son muy visibles.
Los decibeles de su voz son muy bajos, pero el efecto de sus palabras son de mayor magnitud que artefactos nucleares.
Le sirvió al populista Luís Echeverria y ahora es el fiscal de los actos de esta mañosa izquierda absolutista.
Andrés Manuel es el líder de la ignorancia.
Porfirio Muñoz Ledo es un faro de sabiduría.
Hasta mañana.