Por J. Humberto Cossío R.
Nadie me preguntó si quería que se comprara un avión para el presidente de México y tampoco me han preguntado si quiero que lo vendan.
A su llegada al poder, Andrés Manuel rentó un escaparate en Los Estados Unidos y con un letrero que decía se vende.
Nadie se interesó por el avión que es propiedad del pueblo de México y quizá todavía se deba mucho dinero a la empresa vendedora.
Casi un año duró guardado en tierras de “extranja” y el costo sobrepasa a los cuarenta o cincuenta millones de pesos que tuvo que pagar el ordenante que se llama Andrés Manuel. Este individuo es dueño de un rancho que se llama LA CHINGADA y que parece es la inspiración del gobierno de la “cuarta transformación”.
Dicen que van a vender mi avión, y digo mi avión, porque se compró con dinero de mis impuestos y tengo derecho a una parte del precio y puede que interponga demanda para que se me pague lo que me corresponde.
Tampoco me consultaron sobre los nuevos consejeros del INE y fueron los y las gandayas de MORENA los que escogieron los menos peligrosos para sus intereses y doraron la píldora con una concertación con los partidos de oposición.
Así es esto y seguirá siéndolo a través de los siglos de los siglos.
Los veinte propuestos por la comisión de selección al parecer tienen los méritos suficientes para formar parte del INE.
Me doy por bien servido como mandante de la bola de huevones de la Cámara de Diputados federal que pertenecen a MORENA y sus corifeos.
De la oposición no me ocupo por ser cero a la izquierda en todo lo que se acuerda en el recinto legislativo.
La única oposición a lo que ordena el presidente Andrés Manuel se llama Porfirio Muñoz Ledo y mis respetos para esta luminaria.
Hay una esperanza para el 2021 para los que nos horrorizamos con la abusiva composición de la Cámara de Diputados federal.
La inmensa mayoría de los morenistas fueron electos, gracias a que los votantes sufragaron por MORENA por estar Andrés Manuel al frente.
Los diputados federales morenistas no tienen nada en la pelota, salvo algunos que son chuchas cuereras en la política y la grilla.
Esos diputados que llegaron gracias a Andrés Manuel no tendrán la tripa del ombligo pegada al presidente de México y tendrán que rascarse con sus uñas.
Al parecer son borricos muy bien pagados y que nada representan en las grandes decisiones de sus compañeros que llevan la carga legislativa.
Son carne de cañón y dedos para levantar en favor de las iniciativas de MORENA.
Esa es la esperanza que tenemos los que estamos en contra de la abusiva mayoría en la Cámara de Diputados y que anula por completo cualquier signo de democracia.
Andrés Manuel se lanza a recorrer todos los Estados para incitar al voto a los ciudadanos en favor de sus proyectos y con mira a la elección del 2021.
Pero llegará un momento que tendrá que cesar en su campaña por disposición de la ley electoral y son varios meses de abstinencia.
Lo que queremos es que haya menos abusos del gobierno.
Y el 2021 puede cumplir nuestros deseos.
Ya veremos.
Hasta mañana.