Por J. Humberto Cossío R.
Mensajes por WhatsApp.
Te lo dije, te lo dije, Humberto, que ganaría la contienda presidencial Andrés Manuel López Obrador.
Te insistí, te insistí, Carlos, que no te gustarían muchas cosas del gobierno de Andrés Manuel.
No tenía la menor duda que el peje sería el nuevo presidente de México, pero mi palabra estaba empeñada de que votaría por José
Antonio Meade y así lo hice sin dudar un solo instante.
La cancelación del aeropuerto de Texcoco por medio de una absurda encuesta no fue de mi gusto y de Carlos tampoco.
Que a los guevones les entreguen dinero por no trabajar y no estudiar, tampoco le gusto a Carlos y a mi menos.
A Carlos le encanta que Andrés Manuel le pague a la gente por ser viejo y más le encanta que le llegue su dinerito a su cuenta.
Yo estoy de acuerdo, de que se le entregue dinero a los de la tercera edad, siempre y cuando no tengan la manera de vivir.
Yo no podría inscribirme en el programa, sabiendo que puedo subsistir perfectamente sin ese dinero que Andrés Manuel regala a los viejos.
No estoy de acuerdo y Carlos tampoco, de que el presidente de México perdone a los huachicoleros y les regale dinero para que no lo vuelvan a intentar.
Dicen que les ofrece ocho mil pesos mensuales y eso arde.
¿No perseguir a los narcos, a cambio de qué?
¿Se comprometerán ellos a no generar violencia y tampoco vender sus drogas a los mexicanos?
¿O será una rendición del gobierno ante el poder de los criminales?
Carlos tampoco está de acuerdo en que coexistan el poder facto y el poder constitucional y no encontramos la lógica al ofrecimiento de no perseguirlos.
Carlos y un servidor no estamos de acuerdo en el cierre de las estancias infantiles por considerarlas fuente de corrupción.
Los dos expresamos en nuestras platicas, que se investiguen a los corruptos y que dejen operar a las que tanto ayudan a los
infantes y que benefician a sus padres que laboran para sostener decorosamente sus hogares.
Invertir en refinerías, cuando todo apunta para que los vehículos que circulan en todo el planeta utilicen electricidad para su funcionamiento, parece ser una torpeza que mucho le costará al País y lo dejará estancado de nuevo.
Ni a Carlos y tampoco a mí, nos gusta que repita una y otra vez Andrés Manuel que no tendrán castigo los saqueadores de México.
Parece conformarse el presidente con echarles lodo en sus conferencias de prensa mañaneras sin presentar pruebas que demuestren su dicho.
No nos gusta la verborrea y Andrés Manuel parece ser el dueño de toda la que exista en el País.
Anuncia Andrés Manuel el cierre de la colonia penitenciaria de las islas Marías y no sabemos donde meterá a los que ahí cumplen su sentencia.
Está por verse y hasta mañana.